lunes, 13 de febrero de 2023

Un diente de león para los niños y las niñas de Turquía y Siria

 

Qué es lo que queda al diente de león cuando el viento lo ha soplado todo y se ha llevado hasta el último pétalo dejando tan solo la desnudez… la fuerza de la naturaleza es así.

Allá… un potente viento sopla, su fuerza destructora ladea el tallo de un lado a otro una y otra vez, golpeando fuerte las hojas que solo ofrecen resistencia un momento; después de haber cimbrado todo y golpeado todo, la destrucción flota en el viento dejando expuesta a la nada como penumbra de la muerte. El viento huele a tristeza y desolación, porque el viento ha derrumbado todo sin ninguna explicación… la fuerza de la naturaleza es así.

Allá… hay niños y niñas bajo los escombros, caritas que se asoman y nos hacen visible el rostro de la fe. Las manos se multiplican para remover y para liberar, para sostener, para cargar… Las palabras brotan para animar, para consolar… la fuerza de la solidaridad es así.

Allá… bajo los escombros, los encuentros de los niños y las niñas son los que más llenan de fe y han hecho visibles a los invisibles, sus ojos serenos y confiados dan muestra de que aún creen… la fuerza de la esperanza es así.

Acá… un suave canto sopla sobre un diente de león para llevar entre sus semillas un pensamiento: que ningún niño sea visible solamente bajo los escombros mientras que pasa inadvertido entre la guerra, los campos de refugiados o la falta de educación, que lo importante sea siempre visible para todos.

Qué es lo que queda cuando el viento lo ha soplado todo y se ha llevado hasta el último pétalo dejando tan solo la desnudez… solo podemos confiar en la fuerza reconstructora del amor, la fe, la solidaridad, la visibilidad, la hermandad, pero, sobre todo, saber que la liberación de cualquier niño, de entre cualquier tipo de escombro, es lo mejor que podemos hacer por la humanidad.

 

Soplo un diente de león para los niños y las niñas de Turquía y Siria


Betty Cotero

7 comentarios:

  1. Cuanta razón, mi querida Betty, la única fuerza reconstructora, constructora y salvadora es el amor.
    Como siempre un excelente texto reflexivo, gracias por tu genialidad.

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  2. Gracias Betty, por recordarnos lo que tiene verdadero valor para el corazón, la mirada y la acción. Saludos

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  3. Que queda, la desnudez de lo material y descubre el amor!

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  4. Gracias Bety. Rastros de la desolación y desesperación que pueden mostrar rostros de solidaridad, esperanza y amor de quienes somos testigos, cercanos o lejanos, de la realidad.

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  5. La liberación de los niños es lo mejor que podemos hacer!!

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  6. Excelente trabajo el de hacernos reflexionar en la fe y la esperanza de lo bueno que puede haber en un mundo caótico y deshumanizado
    El amor ha sido y es la fuerza que mueve aquello que es resultado de una mente estulta y deshumanizada
    Felicidades Betty por tu creatividad y visión de un mundo mejor
    Sigues viendo en los niños a los protagonistas delos cambios
    Un abrazo afectuoso

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